Las 5 mejores estaciones de esquí de los Alpes

La cantidad de estaciones de esquí que encontrarás en los Alpes es abrumadora, y es posible que te cueste distinguir entre los distintos pueblos con chalets de madera, ¿te ayudamos a elegir tu destino?

Un buen factor a tener en cuenta es la calidad de la estación. La variedad de pistas, la calidad y cantidad de nieve, el acceso en remonte… son factores que varían en cada caso, y que pueden determinar el éxito de tu escapada.

Con la idea de ayudarte a decidir la mejor estación, Booking.com ha preparado esta guía de las mejores pistas de esquí alpino en Europa, y lo ha hecho con la ayuda de los mejores expertos: los clientes de Booking.com. Los destinos se han elegido según recomendaciones para practicar esquí de descenso, además de otros factores que hacen que obtengamos los mejores resultados. * Tanto si buscas pistas para principiantes como si quieres disfrutar de las vistas, aquí tienes nuestras propuestas.

Flattach, Austria

Si te apetecen unas vacaciones relajantes en la nieve, reserva un chalet de madera en el entorno idílico de Flattach. En este pequeño pueblo austriaco rodeado por unas impresionantes montañas con bosques alpinos podrás disfrutar del silencio y la tranquilidad. El glaciar Mölltaler es la principal atracción de la estación de esquí, y es el responsable de sus espectaculares cantidades de nieve. Entre otras ventajas, es una estación relativamente barata y te ofrece la posibilidad de esquiar de noche en un entorno natural prácticamente virgen.

Mauterndorf, Austria

Mauterndorf es un pequeño pueblo austriaco de Salzburgo y un diamante en bruto en el mundo del esquí. La zona de esquí de Grosseck-Speiereck es ideal para las familias, con montañas de hasta 2.400 metros. Las pistas están muy cuidadas y el valle tiene un ambiente muy agradable, en los que los días soleados son perfectos. Los visitantes también tendrán acceso a las regiones de Lungau y Lungo con el mismo forfait, así que podrán elegir entre 4 enormes zonas de esquí.

Avoriaz, Francia

Esta estación de esquí no tiene los inconvenientes que tienen otras más antiguas o con menos altura. Es grande, cuenta con remontes modernos y pistas llenas de nieve, y por eso llegar a lo alto de la montaña y completar el descenso es tarea fácil. Tiene una buena cantidad de nieve, y los esquiadores expertos podrán explorar distintos terrenos y enfrentarse a pistas complicadas, como el famoso “muro suizo”, también conocido como La Chavanette, una dificilísima pista negra. La estación también cuenta con pistas de dificultad media, y los principiantes podrán practicar su cuña sin problemas.

La Plagne, Francia

La Plagne es la estación de esquí más famosa del mundo y recibe a más de dos millones y medio de visitantes por temporada. Su popularidad se explica sobre todo por los cientos de kilómetros de pistas situadas tanto a más de 3.000 metros como a 1.250 metros. Además, cuenta con muchos teleféricos y está cerca de Les Arcs, con quien forma la espectacular zona de esquí de Paradiski, por no mencionar la gran cantidad de opciones para practicar esquí fuera de pistas. Aunque es posible que haya mucha gente, hay tantas pistas que esto no es un problema. De todos modos, es recomendable evitar la “Semana Blanca”.

Dorfgastein, Austria

Dorfgastein se encuentra a la entrada del Valle de Gastein, el lugar en el que los mercaderes medievales pagaban impuestos. Aunque se suele considerar la puerta de entrada a otras estaciones de esquí de la zona, Dorfgastein no tiene nada que envidiar: es fácil llegar, es un pueblo con encanto y ofrece acceso a una amplia variedad de pistas. Algunas se encuentran en una zona cercana relativamente desconocida, en el Valle Grossarl, y otras en la propia zona de Dorfgastein. Es ideal para familias, ya que cuenta con clubs infantiles y pistas de prácticas junto a las pistas para esquiadores expertos.

*Los analistas de datos se han basado en las recomendaciones sobre esquí de descenso. Los destinos incluidos debían contar con más de 50 recomendaciones en total.